Bienvenidos a Bordo

Ante el vacío nosotros tomamos los riesgos, padecemos implacable el placer para sufrir o reír, con suerte ambas. Somos quienes pretenden el peligro domar y la belleza emancipar del devenir. Aquí estamos, somos los amantes y hacemos el amor posible.

Mis amigos tienen sexo.

No sé porqué me sorprende. Los miro hablar, los veo actuar. Sus bocas no intuyen lo que deduzco introducen. El vino me hace espuma en la cabeza, mis amigos también tienen sexo. Acaso importa.

7 comentarios:

Republique Amoureuse dijo...

¿Sería más fácil si viviéramos convenciéndonos mutuamente de que no lo tenemos?

Está "ahí" querido Almirante, y cada cual habla por sí mismo. En potencia, en rigor...el trato entre hembra y macho culmina en unión o asesinato.

Suya,
Lo.

Víctor Frankenstein III dijo...

Jeje, apreciado Almirante.
Pues si es pregunta, en realidad no importa. Bueno, en realidad importa para quien lo tiene, creo que es instintivo, pero no se va por la vida cantando la actividad sexual (hay quien sí, pero, ¿acaso es real? Entonces digo, eso no importa), por otra parte si se va por la vida “marcando territorio”, jaja, es tema para una charla próxima.
El vino hace su efecto colega, ahora creo que me invita a dormir un poco.

Un brindis por la tripulación!

Buena madrugada y genial amanecer.


V.

Calle Amanecer dijo...

Uffff!!

Es un momento crítico cuando, irremediablemente, caemos en la cuenta de que nuestros amigos son seres sexuales...

y además....

¡tienen sexo!.....

y además...

tal vez....

¡entre ellos!!.....

Particularmente no he tenido buena suerte con esos descubrimientos exóticos...espero que la tripulación y usted mismo, Almirante, por lo menos se hayan divertido con dichas revelaciones.

Besos a todos desde la Calle A.

· Almirante · dijo...

Es interesanete esa no-importancia, regularmente uno no piensa en ello hasta que el vino le hace su efecto la espuma del vino. Me pasó en una reunión a media luz con algunos amigos, pensé en ello y quise plasmarlo de forma breve, por su imperante "No-Importancia".

Qué opinan del origen? Les ha ocurrido?

· Almirante · dijo...

regularmente no se piensa en ello hasta que la espuma del vino le hace efecto a uno.

Corrección.

Víctor Frankenstein III dijo...

Así es Almirante, me ha ocurrido, fue la principal razón de que me cayera muy agradable ésta reflexión que compartes.
Y ciertamente el licor tiene mucho para el apremio de la idea. Uno se encuentra charlando, brindando y sin más, he ahí la consciencia de la actividad sexual de los amigos. Sin embargo uno se detiene, es decir, la no-importancia radica en que no necesariamente se quiere estar al tanto de ello, mucho menos a detalle, sólo que sea parte de la continuidad de la charla, jeje.

Satelite dijo...

Sinceramente, conociendo las formas físicas y mentales de muchos de mis amigos, me gusta mas la idea de pensar que no tienen sexo.

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